Ningún amigo mío que me conozca, se ofenderá por esta introducción.
En realidad debía haber sido: ¿Porqué elegir a un pez pudiendo escoger a un perro? Y la explicación es la que sigue:
Porque te hacen llorar
Vease hoy mismo:
Tengo 6 perros, bien? A pesar de poner un anuncio en internet pidiendo ayuda (que no me lo creía ni yo) para sacar de paseo a semejante jauría…no hay nadie dispuesto. Voy a tener que asignar un color del lazo al día en que saco los perros a pasear a ver si es por eso que nadie me ayuda, tanta solidaridad, tanta solidaridad….
Hoy, como no puedo controlar a los 6, me llevo solo a la mitad, es decir, 3, a saber (por aquello de hacerlo más humano): Pascualno¡ (terrier), Moon (sentenciado a muerte por un mosquito y además pastor belga y además mi AMOR) y Fósil ( Alano español y guía en mis borracheras), vaya, un peso medio en el coche de 30 kg de perro, porque el terrier, con lo que se mueve, vale por dos…o tres.
Comienza el viaje, que tampoco es tan largo : al pantano, 15 min en coche…..a velocidad perro (70km/h) por aquello de los vómitos. Correcto. Cada perro adquiere por méritos propios una de las tres ventanillas libres, que previamente están ya bajadas por aquello tan vital y tan pobre de respirar…
Llegamos a las cercanías del pantano, salen los tres escopetados, sin ningún miramiento para con el conductor (yo), llegan al pantano aprox. 10 min antes que la menda lerenda, la cual hacía ya 5 min que había perdido contacto visual con sus prendas..
En el transcurso del paseo ocurren cosas….y una de ellas.. me hace llorar…, a mí, que ni con las cebollas…y es ver al pastor belga, negro zaíno, esbelto, precioso y como he dicho, sentenciado a muerte, correr en campo abierto a más no poder,sin girar en ninguna esquina, hasta dónde quisiera llegar….hasta el final, parece que lo sabe, el tío…el azul del agua recorta su silueta absolutamente negra ¿para qué fotos? mejor esto…primer llanto, pero no de tristeza, si no de lo bello que puede llegar a ser el dolor…es que, más que trágico era espectacular.
Me siento en una piedra, al borde del pantano para verlos nadar. Una piedra amplia, como para montar un campamento…bien?...los perros nadando enfrente, vale?..y os he comentado mi fobia a las arañas? Pués de repente ví una, demasiado cerca, pegué un respingo y como mi centro de masas dejó de estar dentro de la línea de mi apoyo, me caí dentro del pantano…a una hora, que como para secarse al sol…
Decido, sensatamente, volver a casa.
Tengo la mala costumbre de llevar unas bolsas vacías para recoger a la vuelta la mierda de otros…Las lleno, esta vez de multitud de latas de cerveza…que es lo que más hay.
Pero hete aquí que ya no hay containers a la salida del pantano, da igual, ya lo tiro en casa…
Avisto, a la vuelta, a una patrulla de la guardia civil….mmmmm?..ME PARAN, bajo, ante su requerimiento, la ventanilla…allí, además de mí, completamente empapada, estaba el terrier, ladrando a más no poder. Lo aplaco con improperios indignos de una señorita…Me piden los papeles…los tengo en el maletero…me bajo…abro el capot…no están….me vuelvo…sonrío con cara de niña gilipollas…y a todo esto el terrier ladrando desde dentro desaforadamente y lo que es peor, con sus patitas apoyadas en el claxon situado en el volante del coche haciendo de aquello una versión más cutre si cabe de la verbena de la Paloma…decido abrir la puerta y amonestarlo como se merece…la abro…y salen los tres escopetados de nuevo…con tan buena fortuna..que se acuerdan de lo que les digo…que es “lo primero, saludar”..efectivamente…saludan a la guardia civil con sus patas, que el más limpio iba de barro y el más sucio de lo que descomen las vacas…y además, sintiéndose libres de las estrecheces del coche, deciden librarse del agua que les sobra del pelaje…a los pies de la dueña (que la quieren mucho) y por ende de la guardia civil. Sin papeles del coche, sin cinturón puesto, bebiendo cerveza, sin protección canina alguna, sin correas, hablando por teléfono….y acordándome de lo que dije al salir…Nos dejamos todoooooo?, no nos llevamos nadaaaaaaa?, pues eso, sin DNI, sin carnet de conducir, tampoco…..
A todo esto, la poli, atónita, lo que veía dentro del coche eran tres bolsas llenas de latas de cerveza y un descontrol canino difícil de describir, además de una conductora llena de contradicciones…bueno pues….me dejaron continuar sin mayor problema…serían los de antiterrorismo, porque si noooo?, es evidente que no podía montar un efectivo terrorista con tantas trabas, qué listos que son….Supongo que el cúlmen del desconcierto llegó al ver que me entraba la risa floja y no era capaz de articular palabra coherente….los mismos perros me habían hecho llorar de la risa…la verdad es que cuando solicitaba ayuda en internet debía haber puesto que se regalaban entradas para un circo.
Totalmente justificada la elección de “un perro antes que un pez”
En realidad debía haber sido: ¿Porqué elegir a un pez pudiendo escoger a un perro? Y la explicación es la que sigue:
Porque te hacen llorar
Vease hoy mismo:
Tengo 6 perros, bien? A pesar de poner un anuncio en internet pidiendo ayuda (que no me lo creía ni yo) para sacar de paseo a semejante jauría…no hay nadie dispuesto. Voy a tener que asignar un color del lazo al día en que saco los perros a pasear a ver si es por eso que nadie me ayuda, tanta solidaridad, tanta solidaridad….
Hoy, como no puedo controlar a los 6, me llevo solo a la mitad, es decir, 3, a saber (por aquello de hacerlo más humano): Pascualno¡ (terrier), Moon (sentenciado a muerte por un mosquito y además pastor belga y además mi AMOR) y Fósil ( Alano español y guía en mis borracheras), vaya, un peso medio en el coche de 30 kg de perro, porque el terrier, con lo que se mueve, vale por dos…o tres.
Comienza el viaje, que tampoco es tan largo : al pantano, 15 min en coche…..a velocidad perro (70km/h) por aquello de los vómitos. Correcto. Cada perro adquiere por méritos propios una de las tres ventanillas libres, que previamente están ya bajadas por aquello tan vital y tan pobre de respirar…
Llegamos a las cercanías del pantano, salen los tres escopetados, sin ningún miramiento para con el conductor (yo), llegan al pantano aprox. 10 min antes que la menda lerenda, la cual hacía ya 5 min que había perdido contacto visual con sus prendas..
En el transcurso del paseo ocurren cosas….y una de ellas.. me hace llorar…, a mí, que ni con las cebollas…y es ver al pastor belga, negro zaíno, esbelto, precioso y como he dicho, sentenciado a muerte, correr en campo abierto a más no poder,sin girar en ninguna esquina, hasta dónde quisiera llegar….hasta el final, parece que lo sabe, el tío…el azul del agua recorta su silueta absolutamente negra ¿para qué fotos? mejor esto…primer llanto, pero no de tristeza, si no de lo bello que puede llegar a ser el dolor…es que, más que trágico era espectacular.
Me siento en una piedra, al borde del pantano para verlos nadar. Una piedra amplia, como para montar un campamento…bien?...los perros nadando enfrente, vale?..y os he comentado mi fobia a las arañas? Pués de repente ví una, demasiado cerca, pegué un respingo y como mi centro de masas dejó de estar dentro de la línea de mi apoyo, me caí dentro del pantano…a una hora, que como para secarse al sol…
Decido, sensatamente, volver a casa.
Tengo la mala costumbre de llevar unas bolsas vacías para recoger a la vuelta la mierda de otros…Las lleno, esta vez de multitud de latas de cerveza…que es lo que más hay.
Pero hete aquí que ya no hay containers a la salida del pantano, da igual, ya lo tiro en casa…
Avisto, a la vuelta, a una patrulla de la guardia civil….mmmmm?..ME PARAN, bajo, ante su requerimiento, la ventanilla…allí, además de mí, completamente empapada, estaba el terrier, ladrando a más no poder. Lo aplaco con improperios indignos de una señorita…Me piden los papeles…los tengo en el maletero…me bajo…abro el capot…no están….me vuelvo…sonrío con cara de niña gilipollas…y a todo esto el terrier ladrando desde dentro desaforadamente y lo que es peor, con sus patitas apoyadas en el claxon situado en el volante del coche haciendo de aquello una versión más cutre si cabe de la verbena de la Paloma…decido abrir la puerta y amonestarlo como se merece…la abro…y salen los tres escopetados de nuevo…con tan buena fortuna..que se acuerdan de lo que les digo…que es “lo primero, saludar”..efectivamente…saludan a la guardia civil con sus patas, que el más limpio iba de barro y el más sucio de lo que descomen las vacas…y además, sintiéndose libres de las estrecheces del coche, deciden librarse del agua que les sobra del pelaje…a los pies de la dueña (que la quieren mucho) y por ende de la guardia civil. Sin papeles del coche, sin cinturón puesto, bebiendo cerveza, sin protección canina alguna, sin correas, hablando por teléfono….y acordándome de lo que dije al salir…Nos dejamos todoooooo?, no nos llevamos nadaaaaaaa?, pues eso, sin DNI, sin carnet de conducir, tampoco…..
A todo esto, la poli, atónita, lo que veía dentro del coche eran tres bolsas llenas de latas de cerveza y un descontrol canino difícil de describir, además de una conductora llena de contradicciones…bueno pues….me dejaron continuar sin mayor problema…serían los de antiterrorismo, porque si noooo?, es evidente que no podía montar un efectivo terrorista con tantas trabas, qué listos que son….Supongo que el cúlmen del desconcierto llegó al ver que me entraba la risa floja y no era capaz de articular palabra coherente….los mismos perros me habían hecho llorar de la risa…la verdad es que cuando solicitaba ayuda en internet debía haber puesto que se regalaban entradas para un circo.
Totalmente justificada la elección de “un perro antes que un pez”
